Dar la bienvenida al Niño Jesús
Ningún detalle del plan de salvación de Dios es casual. En los relatos del nacimiento y la infancia de Jesús, varias personas (¡y también ángeles!) aparecen en escena. Cada uno de ellos revela algo sobre el misterio de la Navidad.
Ningún detalle del plan de salvación de Dios es casual. En los relatos del nacimiento y la infancia de Jesús, varias personas (¡y también ángeles!) aparecen en escena. Cada uno de ellos revela algo sobre el misterio de la Navidad.
Los ángeles
Alabanza
El nacimiento de Jesús tuvo lugar en silencio, al amparo de la noche. ¿Cómo supieron los pastores que el niño que yacía en el pesebre, rodeado de animales y envuelto en pañales, no era un niño corriente? Los ángeles habían sido enviados para revelar a los pastores lo que hacen sin cesar en el cielo: alabar a Dios. La alabanza, nos enseñan los ángeles, es la mejor manera de responder a la acción de Dios en nuestras vidas, incluso cuando viene a nosotros en medio de nuestras ocupaciones ordinarias. No importa dónde estemos, siempre podemos unir nuestra alabanza y acción de gracias a los cantos de los Santos Ángeles: ¡Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz a los hombres amados por él!
Los pastores
Humildad
Imagínese el asombro de los pastores cuando apareció un ángel anunciando el nacimiento del Salvador. Estos humildes labradores no eran ricos ni importantes a los ojos del mundo, pero Dios los eligió para que fueran los primeros en recibir la noticia de este extraordinario acontecimiento.
Los pastores nos recuerdan el amor de Dios por los que son humildes y pobres. Esto significa, no sólo los que son materialmente pobres. Sino, en especial, los que dependen de Dios para todo. Sólo los que saben cuánto necesitan a Dios están preparados para recibirle. Sólo ellos pueden responder de todo corazón cuando él se revela. Por eso, si queremos encontrarnos con el Señor, debemos esforzarnos por tener “alma de pobres” (Mt 5,3). Entonces, como los pastores, podremos ofrecerle el homenaje de nuestro amor.
Los Reyes Magos
Sabiduría
A los Reyes Magos se les suele llamar “Sabios”, ¡y con razón! Estos gentiles (no judíos) estudiaron las estrellas y adivinaron (correctamente) tanto el lugar como momento en que nacería el Mesías judío tan esperado. Celebramos la visita de los Reyes Magos en la fiesta de la Epifanía.
Sin embargo, los Magos hacen gala de una sabiduría mucho más profunda que los conocimientos que podemos adquirir con el estudio. Al emprender su arduo viaje, nos enseñan que un hombre sabio busca la verdad, incluso a un coste personal. Reconocer al Mesías en medio de circunstancias bajas nos enseña que quien está abierto a la verdad la encontrará en Jesucristo. Por último, al ofrecer a Jesús sus regalos de oro, incienso y mirra, nos enseñan que la respuesta adecuada a un encuentro con Dios, por muy importantes o inteligentes que seamos, es una postura de adoración amorosa.